En el mundo contemporáneo, la industria de la moda ha experimentado una transformación acelerada conocida como «moda rápida», caracterizada por ciclos de producción frenéticos y consumismo desmedido. Aunque esta tendencia ha llevado a la accesibilidad y diversidad de prendas, ha desatado un daño considerable al medio ambiente y la sociedad. La moda rápida es un impulsor principal de la sobreexplotación de recursos naturales, la contaminación y la generación masiva de basura textil. En esta era de consumo desechable, es crucial entender las consecuencias negativas de este paradigma para poder adoptar un enfoque más consciente y sostenible hacia la moda.

En la búsqueda incesante de una moda más sostenible y amigable con el medio ambiente, la industria está siendo testigo de una emocionante transformación gracias a la introducción de innovadoras fibras naturales. Estos materiales no solo ofrecen alternativas ecológicas a los tradicionales, sino que también abren nuevas puertas a la creatividad y el diseño.

Veamos algunas de ellas:

El Piñatex es una revolucionaria fibra extraída de las hojas de la planta de piña. Ofrece una alternativa sostenible al cuero animal y sintético, con una textura similar y resistencia al agua. Marcas como H&M y Ananas Anam lo han adoptado para confeccionar prendas de moda y accesorios exclusivos.

El Tencel, también conocido como Lyocell, se deriva de la pulpa de madera, en su mayoría del eucalipto. Valorado por su suavidad y transpirabilidad, marcas como Eileen Fisher han abrazado esta fibra, demostrando cómo la moda sostenible puede ser sinónimo de elegancia.

El cáñamo es una resistente fibra natural que requiere menos agua y pesticidas en su cultivo en comparación con el algodón. Patagonia ha explorado su uso en ropa outdoor, destacando cómo la moda puede ser funcional y respetuosa con el medio ambiente.

Aunque no es nada nuevo, el algodón orgánico gana relevancia en la moda sostenible. Marcas como People Tree apuestan por esta fibra cultivada sin pesticidas ni químicos dañinos.

La fibra de café, proveniente de los residuos de la industria cafetera, está ganando terreno. Marcas como Singtex han desarrollado textiles a partir de esta fibra, mostrando cómo la moda puede encontrar inspiración incluso en los desechos.

La fibra de banano, extraída de los tallos de las plantas de banano, ofrece una textura única. Marcas como Artkenya están incorporando esta fibra en sus diseños, fusionando moda y naturaleza. La fibra de banano es similar a la fibra de bambú natural, pero se dice que su capacidad de giro, finura y resistencia a la tracción son mejores.

La fibra de nopal es biodegradable y requiere poca agua para crecer. Diseñadores mexicanos como Adrián López Velarde y Marte Cázarez (Desserto) están liderando el camino con prendas a base de nopal y elaboran productos como bolsas, mochilas, carteras y buscan expandir su uso en la industria de la moda, automotriz y aeronáutica.

Los hongos, como el micelio, son usados para crear materiales similares al cuero. Empresas como MycoWorks están llevando la moda a nuevos territorios con esta vanguardista fibra. Los hongos tendrían una durabilidad mejor en comparación con el cuero animal, según investigadores.

Las fibras de ortiga se han usado históricamente ahora están siendo redescubiertas y aplicando nuevas técnicas de hilado. Marcas como Nettle Studio están revitalizando esta fibra en prendas modernas y ecológicas.

La fibra de loto es conocida por su resistencia y cualidades antibacterianas. Su uso está siendo explorado por marcas como Samatoa Lotus Textiles, fusionando lujo y sostenibilidad. La tela que se obtiene de esta flor da como resultado una mezcla de lino y seda que resistiría a las manchas, además de que sería transpirable.
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Marcas de lujo ya usan estos materiales y ya no es raro verlas en las pasarelas internacionales de las semanas de la moda.

La moda sostenible está avanzando a pasos agigantados gracias a la adopción de estas innovadoras fibras naturales, como consumidores conscientes, desempeñamos un papel crucial en apoyar estas innovadoras fibras naturales y fomentar un cambio positivo en la industria de la moda. Algunas formas en que podemos contribuir son: aprendiendo sobre ellas, usando este tipo de prendas, recomendándolas, aprovechar su durabilidad y contribuir así a la sostenibilidad.

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@ptorresmx

Con información de Telemundo, Fashion United y las marcas antes mencionadas.