Los sorprendentes avances en tecnología deportiva que hemos presenciado en poco más de un siglo de Juegos Olímpicos modernos, desde los primeros cronómetros hasta los drones filmando en 8K, son un reflejo del continuo progreso humano para superar límites.

Estas competencias han presenciado impresionantes innovaciones tecnológicas aplicadas al deporte desde que se reiniciaron en 1896. Uno de los primeros avances documentados ocurrió en Estocolmo 1912, cuando se utilizaron por primera vez cronómetros y cámaras de fotos en la línea de meta para registrar tiempos y distancias con mayor precisión.

Posteriormente, ya en los Juegos de Roma 1960 comenzaron a verse los primeros cambios en equipamiento de competición, con la introducción de nuevos materiales sintéticos como el poliuretano en pistas de atletismo, así como también telas elásticas como el Lycra en ropa deportiva, mejorando el desempeño. Para México 1968 hicieron su debut los primeros calzados con suela de fibra de carbono.

Ya en la década de 1980, con la popularización de computadoras e internet, marcas deportivas como Nike y Adidas introdujeron gadgets electrónicos para que los atletas pudieran monitorear por primera vez indicadores como frecuencia cardíaca o consumo de oxígeno.

En Atenas 2004 llegó una innovación crucial con la implementación del ojo de halcón en tenis, utilizando pantallas gigantes y software de video para asistir en arbitrajes cercanos a la línea. Más tarde en 2018, el mundial de Rusia presentó la tecnología VAR que es hoy común en el fútbol profesional.

Es innegable que el avance tecnológico ha tenido un impacto significativo en la competitividad de los atletas olímpicos. Por un lado, innovaciones en equipamiento como calzado deportivo, trajes de baño hidrodinámicos y bicicletas/naves ultra aerodinámicas, construidos con materiales de punta como fibra de carbono o nanotextiles, han actuado casi como «mejoradores de rendimiento» al optimizar la eficiencia y economía de movimientos. Asimismo, el uso de tecnología wearable con Inteligencia Artificial para monitorear indicadores fisiológicos y biomecánica, está permitiendo entrenamientos más personalizados y precisos.

Sin embargo, aunque hay quienes critican esta creciente «tecnificación del deporte», los Juegos Olímpicos han demostrado que ningún atleta destacado llega al alto rendimiento solo con tecnología: el factor humano del talento innato, voluntad de hierro y años de preparación dedicada, siguen siendo la base indispensable del éxito.

Algunas de las principales marcas de tecnología que están involucradas en el desarrollo de los Juegos Olímpicos de París 2024 son:

– Panasonic: es uno de los principales socios tecnológicos de los Juegos Olímpicos. Ha instalado cámaras de video de ultra alta definición 8K junto con un gran video muro y proveerá toda la tecnología de transmisión y equipos de audio como micrófonos y parlantes.

Intel: es otro de los grandes socios tecnológicos. Está involucrado en mejorar experiencias inmersivas para espectadores en los estadios, con realidad aumentada y realidad mixta. También proveerá plataformas computacionales para manejo de datos.

– Atos: es el responsable de proveer toda la infraestructura de Tecnologías de la Información del evento, incluyendo computadoras, redes, centros de datos y seguridad digital.

– Airbus: está trabajando en diferentes aplicaciones de movilidad aérea urbana durante los juegos. Se utilizarán drones y vehículos eléctricos voladores para seguridad, filmaciones aéreas y logística.

– Omega: es la marca oficial responsable de la precisión de tiempo y mediciones de jueces. Utilizará cámaras de alta velocidad y los sensores más avanzados para cronometrajes muy exactos.

– Samsung: es socio oficial para equipamiento inalámbrico. Proporcionará dispositivos 5G para tener la mayor conectividad posible en los estadios.

Estas son solo algunas de las marcas de tecnología más emblemáticas que han estado desarrollando soluciones específicas para los Juegos Olímpicos durante años.

En algunos años, los Juegos Olímpicos de 2028 en Los Ángeles estarán teñidos de un fuerte carácter tecnológico y de vanguardia. Veremos la Inteligencia Artificial y el aprendizaje automático integrados como nunca antes para la toma de decisiones en muchos deportes, con sistemas de visión computarizada y sensores de movimiento determinando resultados y desempates donde antes el ojo humano y los jueces tenían la última palabra.

La interacción con realidad virtual y realidad aumentada se volverá omnipresente tanto para mejorar entrenamientos de atletas, como para enriquecer la experiencia de los espectadores. La tecnología tendrá también un rol clave en la eficiencia y sustentabilidad del evento, desde el monitoreo ambiental con drones y sensores IoT, hasta vehículos autónomos y materiales nobles. Los Ángeles 2028 pintan para ser los Juegos Olímpicos que marcarán la transición a una nueva era con la tecnología y la IA como grandes protagonistas.

¡En sus marcas!

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@ptorresmx

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